Pasamos un rato por el Quartier Latin, nos sentamos a comer unas crepes Suzette; no eran gran cosa, pero eran en París, lo que las hacía ricas, ¡jaja! De ahí, nos tomamos sendos taxis para ir a la Gare d’Orsay para ver a los impresionistas. Llegados, entramos al museo y, si bien yo los había […]